El sábado pasado llegamos por fin a España después de 14 horas, tras un comienzo temprano en Alemania. Las bicicletas también están incluidas, por supuesto.

Entonces llegó el shock: desgraciadamente no pudimos salir el lunes como estaba previsto porque me dio una infección en el oído medio y tuve que tomar antibióticos. Ahora me siento mejor y al menos el dolor ha desaparecido.
Pero eso también significa que ahora nada se interpone en nuestro camino y podemos ponernos en marcha. Hoy hemos hecho las maletas y hemos reservado el hotel para la primera noche del jueves al viernes.

La ruta por la costa es muy bonita y nos llevará por muchos lugares encantadores. Cada día es un reto, con casi 70 km y muchos ascensos de unos 1000 metros. Pero como dice el refrán: ¡sólo los duros entran en el jardín!

Estamos motivados. ¿Y por qué hacerte la vida cómoda y ver el Tour de Francia en tu televisor de casa cuando puedes hacer tu propia pequeña Vuelta a España?